La Logística Inversa es una de las tareas más complejas para cualquier empresa y un complicado reto para aquellos profesionales que deben desarrollar la estrategia operacional con la que llevarla a cabo. Su gestión está condicionada por una serie de casuísticas que vienen determinadas por cuatro factores importantísimos, que son: el sector, el mercado, el producto y, por supuesto, el cliente.
La gestión óptima de la Logística Inversa de una compañía es de suma importancia, dado que tendrá una repercusión directa en diferentes departamentos de la dicha compañía. Algunos ejemplos de la repercusión de una buena gestión pueden ser:
- Reducción de la obsolescencia
- Reducción del Inventario
- Mejora de la Calidad del Servicio al Cliente
- Mejora del Product Mix en los puntos de venta
- Apertura de nuevas vías de negocio
- Ampliación de la vida del producto
A todo esto, cabe añadir la tendencia o, en muchos casos, la necesidad que afrontan actualmente la mayoría de empresas del sector Retail, es llevar a cabo un sistema de ventas Omnichannel. Para quién no esté familiarizado con el término, se trata de un enfoque de venta dónde el cliente se convierte en el punto de venta. Esto quiere decir que el cliente decide dónde compra, dónde recoge y dónde devuelve, obligando así a la interacción entre todos los canales de venta de la compañía.
Con este nuevo sistema de ventas la eficiencia en la Logística se convierte una vez más en un aporte de valor para el cliente mientras que para la empresa representará una nueva batalla por mejorar la velocidad y el coste.
Para mayor información https://meetlogistics.com/cadena-suministro/gestion-de-la-logistica-inversa-en-el-retail-2/