Antes de entrar en materia, cabe señalar que, según estudios internacionales, en Latinoamérica existe solo un 42% de tercerización en los procesos de las empresas, Europa supera el 90%, Estados Unidos tiene un 80% y Asía 85%. Esta estadística nos demuestra que la competitividad de los mercados, provoca que las empresas decidan tercerizar para volverse más eficientes.
No cabe duda que la tendencia a delegar operaciones va en aumento, sin embargo, los dueños de las empresas deben realizar un proceso de análisis antes de dar el paso.
- Determinar cuáles son las principales actividades de la compañía: Este tipo de actividades son las que definen a la empresa y la hacen diferenciarse de la competencia aportando un valor agregado. En pocas palabras, es lo que mejor sabe hacer la compañía.
Una vez que se han identificado, estas actividades deben seguirse llevando a cabo desde dentro de la empresa, nunca tercerizarse. El resto bien pueden delegarse, como por ejemplo la administración de nómina, dado que es un proceso que no afecta la forma de trabajar de la empresa.
- Evaluar el costo de las actividades que se planea tercerizar: Para saber cuál es el costo de una actividad, no se recomienda una contabilidad tradicional, sino un Costeo basado en actividades o ABC Costing por sus siglas en inglés (Activity-based costing), que consiste en un sistema que asigna costos a un producto o servicio, basado en los recursos que consume. La diferencia con el sistema tradicional, es que, en este último, los costos indirectos (marketing, servicios, etc.) son aplicados en proporción a los costos directos.
- ¿Qué es más barato, hacer o comprar? Una vez determinado el costo de hacer las cosas internamente, se debe comparar con el costo de pagar para que una empresa especializada lo haga. Tomando en cuenta factores como la seguridad y tiempo que se ganan para realizar las operaciones “core” del negocio, pues se trata de un valor indirecto y muchas veces más importante que el monto a pagar.
- Realizar un análisis de proveedores: Inclusive, aunque el costo por tercerizar sea adecuado, se debe prever que la empresa suministradora asumirá un papel de cooperación mutua, e intercambio de información. También es importante conocer las herramientas con que labora, por ejemplo, en el caso de una empresa dedicada a la administración de nómina, es importante saber si cuenta con algún software de nómina.
Para mayor información puede acceder a http://www.ips.com.mx/blog/4-tips-para-saber-cuando-tercerizar-servicios-administracion-de-nomina